Las alitas de pollo al horno son una opción deliciosa y fácil de preparar que nunca decepciona. Con su piel crujiente y carne jugosa, son perfectas para una comida informal o como un sabroso aperitivo. Esta receta es ideal para quienes buscan disfrutar de unas alitas llenas de sabor sin la necesidad de freírlas.
Ingredientes
- 1 kg de alitas de pollo
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de pimentón dulce
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de cebolla en polvo
- 1 cucharadita de comino en polvo
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
- 1/2 cucharadita de chile en polvo (opcional para un toque picante)
- 2 cucharadas de salsa barbacoa (opcional, para barnizar)
Elaboración
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Preparar las alitas: Precalienta el horno a 200°C. Lava las alitas de pollo y sécalas bien con papel de cocina. Esto ayudará a que la piel quede más crujiente al hornearlas.
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Marinar las alitas: En un bol grande, mezcla el aceite de oliva, pimentón, ajo en polvo, cebolla en polvo, comino, sal, pimienta y chile en polvo (si lo usas). Agrega las alitas al bol y mézclalas bien para que se impregnen uniformemente con la marinada.
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Hornear: Coloca las alitas en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear, dejando espacio entre cada una para que se cocinen de manera uniforme. Hornea durante 25-30 minutos, dándoles la vuelta a mitad de tiempo para que se doren por ambos lados.
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Toque final: Si decides utilizar salsa barbacoa, saca las alitas del horno 5 minutos antes de que estén listas, barnízalas con la salsa y vuelve a introducirlas al horno hasta que la salsa se caramelice.
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Servir: Una vez doradas y crujientes, saca las alitas del horno y sírvelas calientes. Puedes acompañarlas con una salsa ranch o de queso azul para un toque extra de sabor.
¡Disfruta de estas deliciosas alitas de pollo al horno con tu familia y amigos!
