Las mollejas de cordero son un manjar que combina texturas suaves con sabores profundos, ofreciendo una experiencia culinaria única. Esta receta al vino blanco realza su delicadeza con aromas y sabores que se complementan a la perfección, creando un plato sofisticado y lleno de matices. Perfectas para una ocasión especial o para quienes desean explorar las distintas delicias que ofrece el cordero, estas mollejas prometen deleitar a todos tus invitados.
Ingredientes:
- 500 g de mollejas de cordero, limpias
- 2 dientes de ajo, finamente picados
- 200 ml de vino blanco
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta negra al gusto
- Perejil fresco, picado (para decorar)
- 1 hoja de laurel
- Zumo de 1 limón
Elaboración:
- Comienza limpiando las mollejas con agua fría y déjalas en remojo en agua con un poco de zumo de limón durante 30 minutos. Luego, escúrrelas y sécalas con papel de cocina.
- Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto. Añade las mollejas y fríelas hasta que estén doradas por todos lados. Sazona con sal y pimienta al gusto.
- Añade los ajos picados a la sartén y cocina durante un minuto, hasta que estén fragantes. Vierte el vino blanco y agrega la hoja de laurel. Deja que el alcohol se evapore y reduce el fuego. Cocina a fuego lento durante 20 minutos, o hasta que las mollejas estén tiernas.
- Sirve caliente, decorando con perejil fresco picado.
